Informes de la Comisión sobre Libertad Religiosa

Informe anual de la Comisión de Estados Unidos sobre Libertad Religiosa Internacional de 2020

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Desde que cayó el régimen islamista, Sudán ha realizado avances significativos en materia de libertad religiosa, señala el informe sobre libertad religiosa en 2020 elaborado por la Comisión de la Libertad Religiosa Internacional de EE. UU. (USCIRF). En cambio, entre los países donde ha empeorado el respeto al derecho humano, destaca la India.

El gobierno de transición en el país africano ha derogado la sharía, así como las leyes sobre la blasfemia y la apostasía. Al mismo tiempo, está mejorando paulatinamente la protección de los derechos humanos y hace solo unos días ha vuelto a penalizar la mutación genital femenina.

También ha cambiado sustancialmente la situación de Uzbekistán, que, como Sudán, recibe el asesoramiento de la USCIRF. El gobierno de la antigua república soviética, de mayoría sunnita, ha mostrado más tolerancia hacia el culto de otras religiones, aunque siguen existiendo presos por motivos de conciencia.

La Comisión recomienda al Departamento de Estado cambiar la calificación que tenían estos países y que pasen a engrosar la lista de los llamados “países a vigilar”, en lugar de estar, como hasta ahora, en la de los “países de especial preocupación”, una categoría que se reserva para aquellos en los que se producen violaciones severas de la libertad religiosa que conlleven torturas, detenciones arbitrarias, persecuciones violentas o vulneración de derechos fundamentales.

Discriminación en la India

Estatua de la libertad. Nueva York (Estados Unidos)
Estatua de la libertad.
Nueva York (Estados Unidos)

Frente a los avances en esos países, en el otro lado de la balanza se sitúa India, donde ha aumentado la discriminación religiosa. El gobierno de Narendra Modi ha puesto en marcha políticas que violan la libertad de creencias, perjudicando especialmente a la población musulmana. Lo que ha suscitado mayor polémica ha sido la reforma de la ley de ciudadanía promulgada el pasado mes de diciembre, que otorga la condición de ciudadano del país a miembros de las minorías religiosas de Pakistán, Afganistán y Bangladesh, pero no a los inmigrantes de origen musulmán.

>El ejecutivo de Modi ha exacerbado el nacionalismo hindú y espoleado a algunos estados de la India a adoptar medidas que limitan el pluralismo religioso. Según la USCIRF, se han orquestado campañas de persecución contra grupos religiosos y se ha incitado a la violencia contra quienes profesan el islam.

El informe denuncia también la existencia de leyes que criminalizan la conversión a otras religiones, por ejemplo, o que fiscalizan la labor de las ONG de inspiración religiosa, lo que pone en peligro la labor y el culto cristiano. De ahí que la USCIRF recomiende incluir a la India, por primera vez, en la lista de países donde más riesgo existe para la libertad religiosa.

China y Rusia

Además de la India, hay otros países en los que se producen violaciones flagrantes contra la libertad religiosa, como Birmania, Eritrea, Irán, Nigeria, Corea del Norte, Pakistán, Arabia Saudí, Siria, Tayikistán, Turkmenistán o Vietnam. Junto a ellos, China y Rusia son objeto de atención particular en el informe.

En el caso de China, destaca la persecución contra los musulmanes uigures y la existencia de campos de trabajo, donde se calcula que han llegado a estar internados más de un millón de miembros de esta minoría. Pero tampoco hay libertad para practicar otras religiones, ya que se ha recrudecido la presión sobre quienes practican el cristianismo o el budismo tibetano, por ejemplo.

También en Rusia se produce un retroceso del pluralismo religioso, según la USCIRF. El gobierno persigue cualquier manifestación de “extremismo”, pero sin aclarar qué comportamientos considera “extremistas”. Con ese pretexto, ha llevado a cabo detenciones e impuesto multas a minorías religiosas “no tradicionales”. Especialmente grave es la situación de los testigos de Jehová, prohibidos en el país desde 2017, que han sido objeto de numerosos ataques durante el año pasado.

Tendencias globales

La USCIRF es un organismo formado tanto por demócratas como republicanos, pero independiente del gobierno. Su misión es realizar un diagnóstico sobre la libertad religiosa en el mundo, elaborando un informe anual, y asesorar al presidente de EE.UU., al Congreso y a los organismos encargados de la política exterior norteamericana.

Este año, el documento publicado incorpora algunas novedades. De un lado, en cuanto a las clasificaciones, adapta las categorías empleadas por el Departamento de Estado. De otro, trata de ser más específico y concretar los motivos por los que un país merece una u otra catalogación. Además, añade un breve comentarios sobre tendencias globales.

En este sentido, llama la atención sobre la influencia que está adquiriendo China en el escenario internacional y teme que de alguna manera su nuevo papel en el mundo ayude a difundir su actitud ante la religión. Aumenta también el nacionalismo etnorreligioso, como demuestra el caso de India, y el número de ataques a lugares de culto.

El informe también se hace eco del incremento de altercados antisemitas, especialmente en Europa. Igual preocupación suscita el creciente número de países, hasta 84, según sus datos, que cuentan con leyes contra la blasfemia, que han ampliado su regulación, como Indonesia, o disponen de órganos públicos que cercenan la libertad de expresión y de conciencia.

Fuente: Aceprensa, servicio del 5 de mayo de 2020