El HHS (Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos) sigue sin proteger la libertad religiosa de todas las empresas en la propuesta de modificaciones a la norma que obliga a las empresas a brindar planes de salud que incluyan esterilizaciones, anticonceptivos y fármacos abortivos, según explicaron diversos expertos.
El primero de febrero, el HHS anunció su intención de considerar nuevos cambios en el mandato abortista, que inicialmente incluía algunas exoneraciones que beneficiaban a los grupos religiosos sin fines de lucro que contratan principalmente a personas de su misma fe y que fueron creadas con el fin de difundir sus creencias y servicios religiosos.
Con los nuevos cambios, la administración de Obama explicó que los empleados de organizaciones religiosas sin fines de lucro que estén exonerados de esta norma, recibirían a través de pólizas de seguro paralelas y sin costo alguno, una cobertura de anticonceptivos.
Varios defensores de la libertad religiosa del país expresaron su decepción al conocer estos cambios sugeridos y presentados en un documento de 80 páginas, calificándolos de complejos. Explicaron que deben ser analizados con detenimiento.
Mientras esta propuesta es evaluada, las organizaciones que no están libres de exoneraciones siguen obligadas a cumplir con la norma abortista.
Brian Walsh, director ejecutivo del Programa de Libertad Religiosa Estadounidense del Centro Ético y Pólizas Públicas en declaraciones a ACI Prensa el 4 de febrero dijo que “esta redefinición unilateral de la libertad religiosa mina el carácter sagrado de este derecho para todas las personas. Incluso para aquellos que no están afectados y para los que se oponen".
En los últimos meses han sido presentadas más de 40 demandas provenientes de entidades religiosas católicas como la Universidad de Notre Dame y la Arquidiócesis de Nueva York, que reclaman el respeto a la libertad de conciencia.
Varios líderes religiosos se han pronunciado por la limitada definición de religión que adopta esta norma para aplicar excepciones.
Esta simple definición de empleador de organización religiosa sin fines de lucro “se refiere a Iglesias, servicios anexos y convenciones y/o asociaciones de iglesias, así como exclusivas actividades religiosas”.
En esta definición ingresan las Iglesias, casas de alabanza y sus organizaciones afiliadas, también incluyen mezquitas y servicios de comida a los pobres y colegios parroquiales que podrían ser exonerados incluso si son destinados a miembros de otra fe.
Sin embargo hay una gran cantidad de instituciones que no hacen parte de esta definición, como organizaciones de caridad, colegios y hospitales.
El Asesor General del Fondo Becket para la Libertad Religiosa, Kyle Duncan, expresó que los cambios en el mandato abortista de Obama siguen sin proteger “la libertad religiosa de millones de estadounidenses".
Duncan expresó su decepción y dijo que existen dudas que con este cambio de que “aquellos que han sido previamente exonerados del plan, ahora tengan que adoptar la medida de tener el plan por terceras partes”.
El presidente de Catholic Advocate, Matt Smith, señaló que el "gobierno no debe elegir ganadores y perdedores cuando se trata de preservar nuestras libertades religiosas más preciadas".
Por su parte, Marjorie Dannenfelser, presidenta de la Lista Susan B. Anthony que promueve a políticos pro-vida , sostuvo que la propuesta excluye injustamente a las organizaciones que no se identifican con una religión determinada.
La Alianza Defendiendo la libertad, que maneja varias demandas de libertad religiosa, explicó que la nueva modificación "sigue cubriendo solo una pequeña porción de las organizaciones religiosas" y que esta excepción deja sin protección a las empresas privadas.
Entre las más de 100 organizaciones privadas que han presentado su demanda en contra de esta normativa, y que van ganando su primera batalla legal son Hercules Industries de eficacia energética y de energías renovables, y el Grupo Triune, especialista en facilitar la reincorporación de trabajadores accidentados.
Por otro lado la gigante Hobby Lobby, líder en la industria de arte y artesanías, si bien es cierto ganó también en una primera instancia pero aún corre el riesgo de pagar multas diarias de hasta 1,3 millones de dólares.
El Cardenal Timothy M. Dolan, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU., dijo que espera de un análisis jurídico completo de los cambios propuestos antes de pronunciarse al respecto.
Fuente: ACI Prensa